Apenas unas horas después de los disturbios causados por manteros senegaleses en Tarragona, un grave incidente sacudió Caldes de Montbui (Barcelona). Más de 250 inmigrantes africanos se enfrentaron a los Mossos d’Esquadra en una refriega que dejó dos detenidos y tres agentes heridos, uno de ellos de la Policía Local.
Todo comenzó cuando una patrulla de los Mossos intentó identificar a dos inmigrantes en un operativo antidroga cerca de la estación de autobuses de Caldes de Montbui. Los hombres se negaron a mostrar su documentación y, según fuentes policiales, iniciaron un enfrentamiento directo con los agentes.
La tensión escaló rápidamente. Lo que empezó como una discusión verbal derivó en forcejeos entre los inmigrantes y los policías. En pocos minutos, más de 250 inmigrantes africanos llegaron al lugar, intentando mediar y presionar a los Mossos para que abandonaran su labor de identificación.
Con el apoyo de una patrulla de la Policía Local, los Mossos enfrentaron a la creciente multitud. La situación se tornó violenta y derivó en un choque directo. Los inmigrantes, animados por su número, resistieron con fuerza a las órdenes de los agentes en Caldes de Montbui.
Durante los altercados, dos agentes de los Mossos d’Esquadra y un policía local resultaron heridos. Finalmente, los agentes lograron detener a dos inmigrantes, acusados de resistencia y atentado contra la autoridad, en medio de un ambiente de máxima tensión.
Ya en la noche, los detenidos fueron trasladados a la comisaría de los Mossos en Caldes de Montbui. Sin embargo, unos 200 inmigrantes les siguieron y se concentraron frente al edificio, rodeándolo y mostrando su desacuerdo con las detenciones realizadas.
El asedio a la comisaría incluyó el lanzamiento de objetos contra la fachada. Tras horas de tensión y la llegada de refuerzos policiales, los inmigrantes, al ver que no liberarían a los detenidos, se dispersaron, no sin antes registrarse leves enfrentamientos.
Por otro lado, ese mismo jueves, en Salou (Tarragona), una treintena de manteros senegaleses cortó la avenida marítima con barricadas. Protestaban por una operación de la Guardia Civil contra mafias de productos falsificados que desmanteló tres almacenes.
Los manteros causaron daños en el mobiliario urbano y mantuvieron la avenida cerrada durante más de tres horas, lanzando objetos a los Mossos. La Guardia Civil incautó cerca de 10.000 productos deportivos falsificados en esta operación en Salou.
Tras largas negociaciones entre los manifestantes, el Ayuntamiento de Salou y los Mossos d’Esquadra, los manteros retiraron las barricadas. A cambio, se acordó una reunión con el alcalde para este viernes 6 de junio, buscando soluciones al conflicto.