La Policía Nacional, con apoyo de la Policía Local, ha arrestado a siete ladrones de origen argelino, georgiano, rumano y colombiano, de entre 27 y 44 años, por robos en la Playa de Palma. Las detenciones se llevaron a cabo entre el 5 y el 8 de junio en distintos operativos.
El primer incidente ocurrió la madrugada del 5 de junio en la carretera de s’Arenal. Agentes de paisano observaron a tres sospechosos merodeando entre las tumbonas de la playa. Uno se agachó mientras los otros vigilaban, y finalmente huyeron de forma apresurada de la zona.
Posteriormente, los individuos se reunieron con una cuarta persona en un parque cercano, donde entregaron un objeto. Los agentes descubrieron que una víctima había perdido un bolso con ropa, zapatillas, dinero y un móvil, confirmando el robo en la playa.
Al regresar los sospechosos, la víctima los reconoció. Los policías intentaron interceptarlos, pero uno arrojó algo al suelo y huyó. Los otros también escaparon, deshaciéndose de objetos. Finalmente, fueron capturados tras una breve persecución.
En la detención, uno de los sospechosos portaba un móvil ajeno. Entre los objetos descartados, los agentes hallaron la ropa y las zapatillas robadas, que fueron devueltas a su dueña. Este hecho marcó el inicio de las intervenciones policiales.
El 6 de junio, también de madrugada en s’Arenal, agentes en patrulla a pie vieron a un hombre junto a una hamaca. Este tomó un bulto y se escondió bajo la caseta del socorrista, manipulando lo sustraído antes de ser interceptado por la policía.
Los policías lo detuvieron con una cartera y un billete en las manos. El hombre afirmó haberlos encontrado, pero una turista en el lugar confirmó que eran suyos. Este nuevo robo evidenció la persistencia de los hurtos en la zona.
Dos días después, el 8 de junio, en s’Arenal, los agentes reconocieron a tres hombres por intervenciones previas y los siguieron. Los sospechosos rodearon a un hombre, distrayéndolo con gestos mientras uno le robaba el móvil del pantalón.
Los ladrones huyeron en direcciones opuestas para despistar, pero los policías los interceptaron rápidamente. Uno de ellos llevaba el teléfono sustraído. Esta detención cerró una intensa operación contra los hurtos en Playa de Palma.