La Audiencia de Madrid ha dictado una sentencia de tres años de prisión contra una mujer boliviana por la muerte de su pareja en 2020 en Villa del Prado. El tribunal considera que no hubo intención de homicidio doloso, sino que buscaba lesionar a su novio y, por imprudencia, le causó la muerte mientras estaba bajo los efectos del alcohol.
La resolución de la Sección Séptima, a la que tuvo acceso EFE, se alinea con el veredicto del jurado, que respaldó la tesis de la defensa. Sin embargo, la Fiscalía pedía 14 años de cárcel por homicidio doloso, argumentando que la acusada actuó con intención de matar a su pareja, Rodolfo B.S.
Los hechos ocurrieron la madrugada del 6 de junio de 2020 en la vivienda de la pareja, ubicada en la urbanización El Encinar del Alberche, en Villa del Prado. Durante una discusión, la mujer clavó un cuchillo de 17 centímetros en el hombro izquierdo de Rodolfo, causándole una grave herida.
Esta lesión provocó una hemorragia masiva que resultó letal en pocos minutos. Según el jurado, la acusada no tuvo intención de matar, pero al herir en una zona crítica y alcanzar una arteria, causó un desenlace fatal que debió haber previsto al usar el arma.
El jurado estableció que la mujer, Lucía, actuó «con la intención de lesionarle», pero no deseaba su muerte, aunque «debió prever que podía pasar». Esta imprudencia, agravada por el consumo de alcohol, que afectó sus facultades, fue clave en la calificación del delito.
Tras el incidente, Lucía trató de salvar a su pareja desesperadamente. Buscó las llaves del coche para llevarlo a urgencias, llamó repetidamente al 112, le aplicó un torniquete y realizó maniobras de reanimación cardio-pulmonar, según consta en los hechos probados.
Además, colaboró activamente con la investigación policial, proporcionando información relevante y permitiendo la toma de muestras de ADN. Este comportamiento fue considerado por el tribunal como un esfuerzo por reparar el daño causado tras el trágico suceso.
La sentencia detalla que ese día ambos discutieron por celos de él hacia ella. Lucía se quitó el anillo de compromiso y amenazó con irse, lo que llevó a Rodolfo a tomar un cuchillo y advertirle que la mataría, según el testimonio de la acusada.
En el forcejeo, ella afirmó que él se clavó el cuchillo, pero el jurado determinó que fue Lucía quien lo hirió. Ambos estaban bajo los efectos del alcohol, lo que influyó en el desarrollo de los hechos y en la percepción de la situación.
Finalmente, la condena incluye dos años por lesiones agravadas y un año por homicidio por imprudencia grave. El tribunal señala que «el resultado mortal es imputable a título de imprudencia grave», ya que no valoró el riesgo al usar un cuchillo de gran tamaño.
Se aplican agravantes por parentesco y atenuantes por embriaguez, reparación del daño y dilaciones en el proceso. Asimismo, se ordena una indemnización de 30.000 euros a cada uno de los dos hijos de la víctima como compensación por la pérdida.