La Policía Nacional ha arrestado en Alcorcón (Madrid) a dos hermanas de 21 y 19 años, de origen marroquí, acusadas de establecer una «academia de la yihad» dirigida a mujeres musulmanas. Bajo la fachada de enseñar el Corán, promovían ideología radical. La investigación comenzó en 2024 tras detectar contenido violento y yihadista en redes sociales.
En el marco de una operación contra el adoctrinamiento terrorista, se desmanteló una red virtual que difundía la ideología de Estado Islámico entre mujeres musulmanas. Según la Policía Nacional, esta estructura buscaba captar y radicalizar a sus seguidoras mediante plataformas digitales, con un enfoque claro en el extremismo.
Las detenidas comparecieron este jueves ante el Juzgado Central número 6 de la Audiencia Nacional. La hermana de 21 años quedó en prisión provisional, mientras que la de 19 años fue liberada con medidas cautelares. Este fallo refleja la gravedad de las acusaciones de adoctrinamiento y propaganda yihadista.
Fuentes de la investigación, citadas por Europa Press, revelaron que las jóvenes, nacidas en España, se radicalizaron a pesar de que su familia marroquí, asentada en Alcorcón, no comparte estas ideas extremistas. Este contraste destaca cómo el entorno no siempre influye en la adopción de ideologías radicales.
La hermana mayor, de 21 años, señaló una relación sentimental pasada como el origen de su radicalización progresiva. Aunque los investigadores no han confirmado este dato, sí exploran las conexiones virtuales que mantenían con otros detenidos por yihadismo en España durante el último año.
La red virtual que crearon no necesitaba financiación externa, ya que operaban desde sus móviles. Usaban Whatsapp y Telegram para contactar inicialmente con unos mil participantes, promoviendo una visión radical de la religión y justificando la yihad como primer paso para captar mujeres.
Además, la detenida de 21 años utilizaba TikTok e Instagram para proyectar una imagen de compromiso extremo, declarando su disposición a morir por la yihad. Este uso de redes sociales era clave para atraer y adoctrinar a mujeres en diferentes etapas de radicalización.
No obstante, fuentes de Europa Press indicaron que, aunque fantaseaban con unirse a la yihad, no había evidencia de planes concretos para actos criminales. Su rol, según Estado Islámico, se centraba en el adoctrinamiento, un papel asignado específicamente a mujeres en esta ideología.
Los agentes constataron que las arrestadas normalizaban comentarios y actitudes terroristas. Una de ellas incluso alabó un ataque violento en el metro de Barcelona en febrero de este año, donde seis mujeres fueron agredidas y una resultó gravemente herida, mostrando su apoyo al extremismo.
Las hermanas accedían a repositorios de Estado Islámico (DAESH) para consumir y difundir contenido de adoctrinamiento y capacitación terrorista. A través de sus perfiles en redes sociales, compartían estas publicaciones, ampliando el alcance de su mensaje radical entre sus seguidoras.
Según la Policía Nacional, crearon una estructura de ingeniería social que, bajo el pretexto de enseñar religión, adoctrinaba a fieles musulmanes. Este sistema funcionaba como una academia virtual de la yihad, con un enfoque predominante en captar y radicalizar a mujeres.
Los investigadores de la Comisaría General de Información (CGI) confirmaron que esta plataforma virtual estaba diseñada específicamente para mujeres, operando como un espacio de adoctrinamiento. Las detenidas tomaban estrictas medidas de seguridad para evitar ser detectadas por las autoridades.
La operación, liderada por la Comisaría General de Información con apoyo de la Brigada Provincial de Información de Madrid, fue dirigida por el Juzgado Central de Instrucción número 6 y la Fiscalía de la Audiencia Nacional, garantizando un enfoque coordinado contra el terrorismo.
Durante el registro del domicilio compartido por las hermanas en Alcorcón, se incautó abundante material electrónico y documentación. Estos elementos están siendo analizados por especialistas para determinar el alcance de sus actividades y posibles conexiones con otras redes yihadistas.
