Los Mossos d'Esquadra detuvieron el pasado 29 de mayo a un inmigrante marroquí de 20 años acusado de perpetrar dos robos con violencia e intimidación en Gavá y Viladecans, en el Bajo Llobregat (Barcelona). El sospechoso amenazó a sus víctimas con una navaja para robarles móviles y objetos de valor, huyendo después en un patinete eléctrico.
Días antes, el 19 de mayo, los agentes recibieron denuncias sobre dos robos violentos ocurridos con pocas horas de diferencia en ambos municipios. El ladrón actuaba de forma similar: se acercaba por detrás a víctimas con el móvil en la mano, las amenazaba de muerte con una navaja y escapaba en patinete.
Las descripciones de las víctimas llevaron a los Mossos a sospechar de un joven que ya había sido detenido en agosto de 2024 por robos similares en la misma zona. Tras mostrar fotografías a los denunciantes, estos identificaron sin dudas al supuesto autor de los hechos en Gavá y Viladecans.
Las investigaciones de la Unidad de Investigación de la comisaría de Gavá permitieron localizar al sospechoso en una casa ocupada ilegalmente en Viladecans. Los agentes montaron un dispositivo y, tras varios días de espera, lograron arrestarlo al salir del inmueble, según informó ElCaso.com.
Tras pasar a disposición judicial, el titular del Juzgado de Instrucción en funciones de guardia ordenó su ingreso en prisión. El detenido contaba con cuatro antecedentes por delitos similares y es considerado multirreincidente por las autoridades competentes.