En la madrugada de este lunes, pasadas las 3:00, el barrio de Lavapiés, en Madrid, fue escenario de un violento ajuste de cuentas. En la calle Embajadores, un magrebí de 25 años fue brutalmente atacado, sufriendo heridas graves que pusieron en riesgo su vida tras una reyerta con antecedentes.
La víctima recibió múltiples golpes en la cabeza, causándole traumatismos de pronóstico reservado, y fue apuñalada en el brazo, con cortes profundos que dañaron tendones y provocaron una hemorragia severa. La rápida intervención de una patrulla de la Policía Municipal del sector Centro-Sur fue clave para salvarle.
Los agentes practicaron un torniquete de urgencia a la víctima, que se desangraba en plena calle Embajadores, logrando controlar la hemorragia. Posteriormente, el SAMUR-Protección Civil lo estabilizó y trasladó de inmediato a un hospital cercano para recibir atención médica especializada.
En paralelo, la Policía Municipal detuvo a dos sospechosos en el mismo barrio de Lavapiés. Se trata de un menor subsahariano de 17 años y una mujer de 20 años, ambos vinculados a reyertas previas con la víctima, lo que apunta a un móvil de venganza personal en el ataque.
El trasfondo de este violento episodio parece residir en conflictos anteriores entre las partes involucradas. Las autoridades continúan investigando los hechos para esclarecer las circunstancias exactas del apuñalamiento y las motivaciones detrás de esta agresión en pleno corazón de Madrid.