Tres jóvenes de origen magrebí agredieron a un turista de nacionalidad inglesa mientras realizaba una compra en la pizzería 24 horas de Monkey Pizza, en la zona de Guanarteme, en Las Palmas de Gran Canaria. El ataque, que sorprendió a la víctima, culminó con una agresión y el robo de su teléfono móvil.
El suceso tuvo lugar alrededor de las 05:30 horas, en el momento en que el turista estaba a punto de efectuar el pago de su pedido. Según fuentes policiales, los agresores, que vestían ropa deportiva, actuaron con violencia y sin previo aviso, abordando al hombre de manera repentina.
A pesar de que el afectado denunció los hechos a una patrulla policial a las 06:00 horas, los responsables del asalto ya habían abandonado la escena. Hasta el momento, no se ha logrado detener a los autores, y la investigación permanece activa para esclarecer lo sucedido.
Este episodio ha reavivado las críticas sobre la inseguridad en el municipio, especialmente durante las madrugadas de los fines de semana, cuando la presencia de agentes policiales es notablemente menor. La situación ha generado preocupación entre los residentes y turistas de la zona de ocio.
Desde el pasado mes de septiembre, el colectivo de la Policía Local de Las Palmas de Gran Canaria mantiene un conflicto laboral que ha derivado en la ausencia de servicios extraordinarios, incluyendo los refuerzos nocturnos. Antes de esta situación, se incorporaban unas doce agentes adicionales los fines de semana, lo que equivalía a seis patrullas más.
El sindicato policial ha señalado que, en el pasado, esta mayor vigilancia permitía un control más efectivo en áreas de alta afluencia como Guanarteme. Sin embargo, la falta de estos refuerzos ha contribuido, según denuncian, a un incremento de los incidentes delictivos en la capital.
Por su parte, los representantes sindicales han expresado su descontento con la gestión del Ayuntamiento de Las Palmas de Gran Canaria, al que acusan de actuar con lentitud ante esta problemática. Afirman que la inacción ha agravado la sensación de inseguridad en barrios concurridos.
Finalmente, el robo y la agresión sufridos por el turista inglés se suman a una serie de actos delictivos registrados durante las noches de mayor actividad en la ciudad. Según el sindicato, la escasa presencia policial no logra actuar como un factor disuasorio frente a este tipo de delitos.