Un senegalés fue detenido este pasado viernes en Sant Josep, Ibiza, tras agredir de forma brutal a dos agentes de la Policía Local mientras era sorprendido ofreciendo drogas a unas turistas. Tras su paso a disposición judicial, el juez de guardia ha decretado prisión provisional comunicada y sin fianza por delitos contra la salud pública, atentado contra agentes de la autoridad y lesiones graves.
Durante su declaración ante el juez, el detenido admitió haber sido interceptado con sustancias como cocaína, MDMA y ketamina. Sin embargo, ofreció una versión calificada como «inverosímil», al asegurar que «unos extranjeros» le habían entregado dichas drogas. Respecto a las graves lesiones sufridas por uno de los agentes durante el intento de detención, afirmó que fueron producto de una «caída accidental».
Este individuo se encuentra en situación irregular en España, sin arraigo ni empleo, lo que incrementa el riesgo de fuga tras los graves hechos ocurridos. Además, tiene un señalamiento judicial en Dinamarca que le prohíbe la entrada al espacio Schengen, norma que ha incumplido al estar en Ibiza, motivo por el cual el juez optó por la prisión provisional.
Según la documentación judicial a la que ha tenido el Periódico de Ibiza y Formentera y ha verificado Invadidos.com, el detenido es un «conocido habitual» en Playa de Bossa, zona donde opera un grupo organizado de inmigrantes de origen africano dedicados a la distribución de drogas y a agredir a agentes que intentan identificarlos o detenerlos. Este agresor cuenta con antecedentes por robo con violencia y delitos contra la salud pública.
La agresión ha generado una profunda indignación en el jefe de la Policía Local de Sant Josep, José Antonio Granados, quien ha subrayado la peligrosidad de su labor y la insuficiencia de medios. En este contexto, ha reclamado el uso de pistolas táser para garantizar la seguridad de los agentes frente a situaciones de extrema violencia como la vivida este viernes.
Por su parte, el alcalde de Sant Josep, Vicent Roig, se pronunció el sábado en redes sociales sobre el incidente: «Es indignante que un policía de Sant Josep que está cumpliendo con su deber se vea en esta situación. Espero que la dirección insular de la Administración del Estado tome nota y actúe. Hemos reclamado varias veces contundencia con la inmigración ilegal y así estamos. Ánimo y pronta recuperación».