Una cala cercana a la playa de la Rijana, en Gualchos-Castell de Ferro (Granada), fue el escenario del desembarco de 17 inmigrantes de origen magrebí en la noche de este miércoles. Tras un viaje en una embarcación neumática de alta potencia, los inmigrantes se lanzaron al agua a unos 10 metros de la costa, mientras la lancha se alejaba rápidamente mar adentro.
La Guardia Civil no tardó en llegar a la zona. Minutos después del desembarco, los agentes detuvieron a los 17 individuos en la playa. Todos fueron trasladados al puerto de Motril, donde recibieron atención médica por parte de Cruz Roja. Este incidente marca la primera expedición de inmigrantes del año que llega a este puerto.
Según fuentes de la organización humanitaria consultadas por EFE, los inmigrantes se encuentran en buenas condiciones generales. Sin embargo, algunos requirieron atención especial debido a quemaduras en diversas partes del cuerpo, causadas por la mezcla de combustible de la embarcación con el agua salada. Además, uno de los migrantes sufrió heridas en las manos que necesitaron varios puntos de sutura.
A lo largo de la noche, los 17 magrebíes, entre los que se encuentran al menos cinco menores, fueron puestos a disposición de la Policía Nacional. Desde allí, fueron trasladados al nuevo Centro de Acogida Temporal de Emigrantes (CATE) ubicado en el puerto de Motril, donde continuarán recibiendo la asistencia necesaria.