Un niño de tan solo 13 años fue interceptado este viernes por la tarde mientras intentaba introducir casi 4.000 pastillas en Marruecos a través de la frontera con Ceuta, usando Algeciras como «ruta intermedia». La operación, ejecutada por la Policía Nacional y agentes aduaneros marroquíes, logró frustrar el traslado de los psicofármacos, que se presume serían usados para producir karkubi, una droga devastadora entre los jóvenes del norte de África.
El menor viajaba junto a su padre, un inmigrante marroquí residente en el extranjero, en un vehículo que cruzaba desde Ceuta hacia Marruecos. Durante un control rutinario en la frontera, los agentes notaron algo inusual y descubrieron que el niño llevaba 3.769 comprimidos de psicotrópicos adheridos a su cuerpo con cinta adhesiva, ocultos bajo su ropa.
Tras el hallazgo, el padre fue detenido de inmediato y se inició una investigación judicial para determinar la magnitud de esta tentativa de contrabando. Las autoridades buscan esclarecer si hay más implicados en esta red que explota a menores para el tráfico de sustancias peligrosas entre España y Marruecos.
Aunque el tráfico de hachís desde Marruecos hacia Europa suele acaparar la atención, existe una ruta inversa que alarma a las autoridades: el traslado de medicamentos desde España, especialmente del Campo de Gibraltar, hacia el Magreb. Estos fármacos, como ansiolíticos o sedantes, cruzan fronteras en Ceuta y Melilla con fines ilícitos.
En Marruecos, estos psicofármacos se combinan con hachís, alcohol o disolventes en laboratorios clandestinos para crear karkubi, conocido como la droga de los pobres. Sus efectos son devastadores, generando euforia incontrolable, agresividad, paranoia y comportamientos autolesivos entre quienes la consumen.
Las autoridades sanitarias marroquíes han advertido repetidamente sobre el aumento de adicciones entre adolescentes de zonas marginadas. Según el Ministerio de Salud de Marruecos, uno de cada cinco jóvenes en áreas desfavorecidas ha probado esta sustancia al menos una vez, evidenciando una crisis de salud pública.
