La Policía Nacional detuvo el martes en Pontevedra a un nuevo implicado en la violenta reyerta a puñaladas ocurrida la semana pasada en la plaza de Barcelos. Según fuentes de la investigación, este joven de nacionalidad colombiana no es el sospechoso inicialmente buscado. En el altercado, tres jóvenes de origen magrebí resultaron heridos de gravedad a manos de un grupo de colombianos.
Mientras tanto, otro de los participantes en la pelea continúa fugado, aunque ya estaba identificado por las autoridades. Las imágenes grabadas por testigos y difundidas en redes sociales muestran a este quinto joven como responsable de las heridas más graves. Dos de las víctimas fueron hospitalizadas en Santiago y Montecelo, en Pontevedra, en estado crítico, aunque ahora evolucionan favorablemente.
El último arresto, confirmado ayer por el subdelegado del Gobierno en Pontevedra, Abel Losada, tuvo lugar en la ciudad. Tras ser interrogado, el detenido, un joven colombiano de entre 20 y 25 años, pasó a disposición judicial. Finalmente, se decretó su ingreso en prisión, sumándose a otros implicados ya encarcelados por este caso.
De los cuatro detenidos inicialmente tras el suceso, la magistrada del Juzgado de Instrucción número 3 de Pontevedra ordenó prisión provisional sin fianza para dos de ellos. Así, ya son tres los encarcelados. Los otros dos fueron liberados con medidas cautelares, mientras la investigación clasifica los hechos como lesiones agravadas y tentativa de homicidio.
Los liberados provisionalmente deben presentarse en el juzgado cuando sean citados, han visto retirados sus pasaportes y tienen prohibido salir de España. Además, se les ha impuesto una orden de alejamiento y prohibición de comunicación con las víctimas de la reyerta, como medida de protección tras los graves hechos ocurridos.
La detención más reciente podría estar vinculada a las declaraciones de testigos y sospechosos en sede judicial. La jueza ordenó un nuevo rastreo en la zona de la pelea y las calles por donde huyeron los agresores. En la tarde del suceso, varios de ellos fueron arrestados en esas mismas vías tras una rápida actuación policial.
Este lunes, agentes de la Policía Nacional regresaron a la plaza de Barcelos para buscar más armas, ante la sospecha de que las intervenidas no fueron las únicas usadas. Comerciantes locales critican la falta de vigilancia previa, asegurando que «se veía venir» un incidente de esta magnitud en la zona.
El operativo se extendió desde la plaza hasta calles cercanas, incluyendo una obra en las inmediaciones. También se revisaron alcantarillas, papeleras y contenedores en busca de pruebas adicionales. La investigación sigue abierta para esclarecer todos los detalles de esta violenta reyerta en Pontevedra.
