Por Norberto Domínguez

La Guardia Civil detuvo el pasado miércoles a tres individuos de nacionalidad marroquí, de 28, 38 y 41 años, por presuntamente explotar a 11 mujeres inmigrantes en talleres textiles clandestinos en Manresa, Barcelona. Los acusan de un delito contra los derechos de los trabajadores y de pertenecer a una organización criminal. Dos de los arrestados están en situación irregular en España.

Esta operación fue coordinada por el Equipo de Policía Judicial de la Guardia Civil de Manresa junto a la Policía Local y la Inspección de Trabajo y Seguridad Social. Según un comunicado de la Benemérita emitido este martes, la actuación conjunta permitió desmantelar una red de explotación laboral en el municipio catalán.

Los agentes inspeccionaron dos garajes en el casco urbano de Manresa y hallaron dos talleres textiles ilegales sin licencias. En ellos trabajaban 11 mujeres extranjeras en condiciones irregulares, siete de ellas sin contrato. Las autoridades constataron la precariedad en la que desarrollaban su labor.

Las investigaciones revelaron que los detenidos formaban una organización criminal estructurada. El líder decidía los traslados diarios de producción a grandes áreas comerciales, coordinado por otro integrante, y mantenía contacto con responsables de los talleres que vigilaban el ritmo de trabajo de las mujeres.

Finalmente, la Policía Local de Manresa precintó uno de los locales. Los tres arrestados fueron puestos a disposición del Juzgado de Instrucción número 1 de Manresa, encargado del caso. La actuación pone de manifiesto la lucha contra la explotación laboral en entornos clandestinos.