Marruecos ha realizado 163 operaciones de siembra artificial de nubes desde 2020, un promedio de 23 al año entre 2020 y 2023. En 2024 estas intervenciones se han disparado y han alcanzado las 70 en tan solo diez meses. Así lo explicó el ministro de Equipamiento y Agua, Nizar Baraka, en una reciente intervención recogida por la agencia MAP.
El ministro destacó que estas acciones forman parte del programa 'Al-Ghaith', iniciado por el rey Hassan II y reforzado por el actual monarca, Mohammed VI. Este proyecto tiene como objetivo aprovechar al máximo los recursos hídricos y combatir los efectos de la sequía, un problema recurrente en el país.
Baraka aclaró que las operaciones de siembra de nubes no están relacionadas con las inundaciones recientes en el sureste de Marruecos. Según afirmó, ninguna de estas intervenciones se llevó a cabo en las zonas afectadas por las lluvias torrenciales, que atribuyó a fenómenos meteorológicos extremos vinculados al cambio climático global.
El programa sigue supuestos protocolos científicos muy estrictos para evitar cualquier riesgo, ya que las operaciones solo se realizan cuando las condiciones meteorológicas son favorables y no suponen peligro para la población. En caso de alertas climáticas, se posponen las intervenciones, aseguró el ministro.
La tecnología empleada en 'Al-Ghaith' incluye herramientas avanzadas como sistemas de teledetección, equipos para medir parámetros físicos de las nubes y un sistema de previsión meteorológica a corto plazo. Estas operaciones se realizan principalmente entre los meses de noviembre y abril, el periodo más propicio para obtener resultados.
Marruecos planea expandir en el futuro el programa con la incorporación de un avión equipado con un laboratorio de microfísica y nuevos dispositivos para la siembra de nubes. Además, se reforzarán los recursos técnicos y humanos destinados a este proyecto para garantizar su éxito.
El ministro concluyó destacando que esta iniciativa no solo busca paliar la sequía, sino también modernizar la gestión de los recursos hídricos en Marruecos, una tarea esencial en un contexto de crecientes desafíos climáticos.