En la noche del lunes, una patera arribó a s’Estanyol, en el municipio de Llucmajor, Mallorca, desatando la alarma entre los equipos de emergencia. Una decena de inmigrantes logró escapar del lugar, según testigos, al ser recogidos por una furgoneta que los esperaba en la zona y que abandonó la escena rápidamente antes de la llegada de las fuerzas de seguridad.

A las 23:04 horas, según datos de la Delegación del Gobierno, la embarcación tocó tierra. Unidades de la Guardia Civil del Puesto de Llucmajor, la Patrulla Fiscal de Manacor y la Policía Local se desplazaron al lugar, pero solo lograron localizar a cinco inmigrantes de origen magrebí. El resto del grupo, al parecer, consiguió evadirse sin dejar rastro.

Este incidente rompe con el patrón habitual, según fuentes policiales. Normalmente, los inmigrantes, al llegar a la costa o tras desembarcar, contactan con el 112 o piden ayuda a vecinos para alertar a las autoridades. Muchos conocen el protocolo: son atendidos por emergencias, identificados y, según su situación, liberados o puestos a disposición judicial.

La presencia de una furgoneta esperando al grupo sugiere una coordinación previa desde Mallorca, lo que ha generado inquietud entre las autoridades. Se ha abierto una investigación para identificar a los inmigrantes fugados y a los ocupantes del vehículo, así como para determinar si los implicados cuentan con antecedentes.