Un recluso de origen magrebí fue descubierto sin vida en la prisión de Cáceres este jueves. El individuo, de 30 años y residente en Plasencia, estaba bajo investigación por presuntos delitos de agresión sexual y violencia de género. Había participado en una disputa el día anterior y se encontraba en aislamiento.
El fallecido ingresó en la prisión el 25 de abril y estaba cumpliendo una medida cautelar de prisión provisional decretada por un juez tras su detención. La mañana de su muerte, durante el recuento rutinario de los internos, se detectó su ausencia.
El personal del centro penitenciario acudió a la celda donde se alojaba y confirmó que yacía muerto sobre su cama. Inmediatamente, se notificó a los inspectores y a su familia, según informaron fuentes de la prisión de Cáceres.
Una autopsia determinará las causas del deceso, aunque no se han observado indicios de violencia en el cuerpo del recluso.