Doce jóvenes fueron arrestados el domingo pasado tras participar en una pelea multitudinaria en Alicante. Siete de ellos fueron liberados tras declarar en la comisaría, mientras que los cinco restantes fueron puestos en libertad el martes después de presentarse ante el juzgado de guardia y la Fiscalía de Menores.
Las indagaciones policiales sugieren que el robo de un móvil a una joven y el ataque a su compañero, ocurrido días antes, pudieron ser el detonante del enfrentamiento entre dos grupos de jóvenes y menores. Uno de los menores magrebíes fue detenido blandiendo una katana, alegando que el otro grupo la había llevado.
De los doce detenidos por la Policía Nacional y la Policía Local de Alicante, siete eran de nacionalidad argelina y cinco españoles, cuatro de ellos hijos de padres argelinos. Ocho de los detenidos eran menores de edad, y tres de ellos declararon el martes en la Fiscalía, donde se solicitó la libertad vigilada para uno como medida cautelar.
Los tres menores, dos de ellos representados por el abogado Javier Vázquez Martínez, del bufete de José Soler, fueron liberados tras sus declaraciones. Al menos dos adultos fueron presentados ante el juzgado y también fueron liberados bajo condiciones provisionales.
Solo uno de los tres menores admitió su participación en la pelea, aclarando que actuaron en defensa propia tras ser agredidos por jóvenes que días antes habían robado un teléfono móvil a una amiga.