Una patrulla de la Unidad de Intervención Inmediata (UII) se dirigió a una vivienda en la calle Santa Florentina de la barriada de Son Gotleu, Palma de Mallorca, en la mañana del 28 de abril. Su misión era ejecutar una orden judicial de desahucio, pero lo que encontraron dentro de la casa superó todas las expectativas.

Al llegar a la vivienda alrededor de las 10:00 horas, los agentes intentaron acceder sin éxito, por lo que un cerrajero contratado por la propiedad acudió con una radial para abrir la puerta. En ese momento, un hombre que se encontraba en el interior abrió la puerta y protestó airadamente por el ruido que generaba la herramienta.

Los policías le informaron del motivo de su presencia, pero el hombre intentó cerrar la puerta para impedirles el acceso. Sin embargo, los agentes lograron mantenerla abierta y entraron en la casa. Mientras dos policías custodiaban al morador, otros dos comenzaron una inspección para asegurarse de que no había más personas en el interior.

En una de las habitaciones, los agentes se encontraron con una escena inesperada: numerosas macetas con plantas de marihuana, acompañadas de focos de luz y tubos de ventilación, elementos habituales en el cultivo de esta droga. Al continuar la inspección, en otra habitación hallaron más plantas y una instalación eléctrica modificada para iluminar la sustancia estupefaciente.

La Policía Local de Palma incautó un total de 80 plantas de marihuana. Tras revisar las instalaciones de electricidad y agua, los agentes concluyeron que habían sido manipuladas para obtener estos servicios sin coste alguno. El hombre, de 35 años y origen marroquí, fue detenido como presunto autor de delitos contra la salud pública y defraudación de fluido eléctrico.

El detenido negó cualquier relación con las plantas de marihuana, afirmando que solo utilizaba la vivienda para dormir. Posteriormente, fue trasladado a la Sala de Atestados de Sant Ferran para iniciar las diligencias judiciales. Al concluir estas, tanto el detenido como las diligencias fueron trasladados a la Policía Nacional para continuar con el procedimiento legal.