Un agresor de origen magrebí fue detenido este miércoles por la tarde tras intentar agredir a una agente de la Policía Municipal y destrozar un coche patrulla con una botella de vidrio en Terrassa (Barcelona). Este sujeto ya había sido arrestado el pasado 19 de abril por su implicación en una pelea tumultuaria con machetes y palos, en la que fracturó la pierna de un agente y trató de atropellar a varias personas.

El incidente más reciente ocurrió cuando el individuo, al avistar una patrulla, se colocó frente al vehículo para bloquear su paso. Acto seguido, profirió insultos y amenazas de muerte contra la agente que conducía, acercándose a la puerta del coche. Según fuentes sindicales, sacó una botella de vidrio y la lanzó con «toda su fuerza» contra ella, poniendo en riesgo su integridad.

Afortunadamente, la agente reaccionó con rapidez, acelerando el vehículo para esquivar el impacto directo. La botella atravesó el cristal trasero del coche patrulla. Fuentes sindicales han señalado que, de no haber actuado con celeridad, el objeto podría haber causado graves heridas en el rostro de la policía, un desenlace que se evitó por su pronta maniobra.

Desde la sección sindical SIP-FEPOL de la Policía Municipal de Terrassa han expresado su preocupación y exigen que el detenido «ingrese en prisión provisional». Advierten que, si queda en libertad, podría intentar cumplir su aparente «deseo» de «matar a un policía», según han manifestado tras los reiterados episodios de violencia protagonizados por este individuo.

El pasado 19 de abril, en la calle Burgos número 45, se registró una violenta confrontación entre un grupo de diez personas, todas de nacionalidad marroquí, y okupas de un parking. Los primeros acusaban a los segundos de robar coches y locales. Durante la intervención policial, el ahora detenido agredió a un agente, causándole una fractura de pierna que requirió cirugía, y lesionó a otro.

Imágenes de aquel suceso revelaron que los okupas, presuntamente, controlaban el espacio del parking, donde no solo residían de forma ilegal, sino que también desvalijaban vehículos de los vecinos. Con este nuevo ataque, las fuentes consultadas reiteran su temor a que, de no tomarse medidas, el detenido persista en sus intenciones violentas contra los agentes.